EL RADIADOR

El radiador se dio cuenta de que la hora del Taller había llegado. La verdad es que, desde que le habían instalado en aquella sala estaba mucho más a gusto. Entraban varias personas que se ponían a escribir y luego leían sus relatos. El radiador, rememoraba todas aquellas historias y se sentía parte de ellas. Por eso, todos los viernes una hora antes de que llegaran, con todo el cariño se encendía para devolverles el calor que recibía de ellos.

1 comentario

  1. Reparito 2.07

    Ya podia ya!!!

    jejejeje…

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